De pié los muertos

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Julio Flórez

Hoy que el mundo -la patria del poeta-
todo sangriento y enlutado gira,
debe exhalar sonidos de trompeta
y sollozos de océano la Lira!

Hoy del bardo la voz debe ser grito
de conmiseración y de protesta,
trueno que repercuta en lo infinito
como el del Tequendama en la floresta.

Hoy el poeta que ante el gran combate
como asustado ruiseñor abate
alas y arpegio en el blandor del nido,

que no descarga a modo de piqueta
su verso, y calla ante el mundial rugido
de indignación, ni es hombre... ni es poeta!

(Fragmento)